LIGA 2ªDiv. 2022/23 JORNADA Nº26 (5.2.2023)
LIGA 2ªDiv. 2022/23 JORNADA Nº26 (5.2.2023)
PARTIDO OFICIAL Nº 3589
ANDORRA 0-1 REAL ZARAGOZA
Ficha Técnica
FC Andorra: Vidal; Bundu (Germán Valera, 63), Petxarromán (Altimira, 75), Alende, Mármol, Pampín; Aguado, Hevel, Sergio Molina (Iván Gil, 56); Carlos Martínez (Bakis, 63) y Albanis (Jacobo Glez., 56).
Real Zaragoza: Cristian Álvarez; Gámez, Francés, Jair, Nieto; Francho, Zapater (Grau, 86); Bermejo (Bebé, 46), Vada (Alarcón, 67); Mollejo (Puche, 31) y Simeone.
Árbitro: Milla Alvendiz (Comité Andaluz). Amonestó a Bebé (92).
Goles: 0-1, min. 92: Bebé.
Incidencias: Tarde agradable en Andorra la Vella, con 8 grados al inicio del choque (las 16.15) en un día soleado. El césped del Nacional andorrano presentó un excelente aspecto, con algo de hielo recogido en el fondo sur por las bajas temperaturas de las últimas madrugadas (hasta -7 grados). Asistieron a las gradas alrededor de 2.200 espectadores (sobre un aforo total de 3.500), de ellos 350 llegados desde Aragón. El Real Zaragoza vistió de avispa.
Andorra 0-1 Real Zaragoza
73.7 % Posesión 26.3 %
2 remates dentro 3
7 disparos bloqueados 1
9 remates fuera 6
10 disparos recibidos 18
1 tarjetas amarillas 1
0 tarjetas rojas 0
7 faltas recibidas 8
9 faltas cometidas 7
122 perdidas de posesion 126
51 recuperaciones de posesion 53
1 fueras de juego 2
xxxxxx
El Real Zaragoza saca adelante la vital visita a Andorra en el minuto 92 con un gol de Bebé
El último fichaje, suplente de inicio, resolvió un partido igualado que el cuadro zaragocista debió decantar a su favor en la primera mitad.
Bebé llegó y se bautizó como héroe zaragocista. No jugó de inicio por decisión de Escribá, entró en el descanso por la lesión de Bermejo, tuvo una actuación gris durante la trama del partido… pero demostró su calidad enorme en la definición cuando dispuso de un balón franco, solo delante del portero, en la última acción del choque. Estas son las diferencias, los matices que hacen de un jugador que sea de Primera o Segunda División. Y Bebé, que le dio el triunfo al Real Zaragoza en Andorra, no dejó lugar a las discusiones al respecto.
El primer tiempo, en un campo desangelado por su estructura abierta, escasa de gradas y, sobre todo, de público, tuvo al cuadro zaragocista como dominador del juego durante los primeros 25 minutos. La presión zonal de los de Escribá (que dejó en el banquillo a los dos fichajes, Alarcón y Bebé) sirvió de antídoto al habitual manejo de los andorranos del tempo de cada uno de sus envites. Sarabia enseguida se dio cuenta y empezó a mover de banda a los laterales largos (Bundu y Pampín), provocó un tiempo muerto literal mientras se atendía al lesionado Mollejo cerca de la media hora y, en general, se mostró nervioso en sus discusiones con el banquillo zaragocista. Detalles que sostienen la mejor presencia zaragocista sobre el buen césped del Estadio Nacional de Andorra que, sin embargo, no fueron capaces de traducir en ventaja sus rematadores. O sea, lo de siempre en este equipo romo y ciego antes las porterías rivales.
En el minuto 2 Francho remató a placer dentro del área y Vidal rechazó el balón que iba dentro. Lo peor de esa jugada es que la pelota le quedó franca en segunda instancia a Vada, que se recreó, esperó demasiado y su toque, con la portería desguarnecida, lo sacó Petxarromán a córner. Increíble que eso no fuese ya el 0-1 nada más empezar. En el 13, con el Zaragoza envalentonado al verse mejor que el adversario, Simeone acompañó bien una contra rápida de Mollejo desde campo propio, recibió el pase del manchego y, a placer, remató ante Vidal cruzado, llevando la pelota al poste izquierdo y fallando otro tanto cantado, de los que jamás se pueden errar.
En el 19, Mollejo cabeceó solo un córner botado por Bermejo, alto por un metro al acometer la pelota a destiempo. Y en el 40, ya en otra fase más alborotada y rota de la primera mitad, de nuevo Simeone provocó con su velocidad otro remate mano a mano ante el portero local, que había salido fuera del área a tapar la contra. El balón lo tocó el guardameta Vidal in extremis y le quedó a Puche, a 35 metros del marco vacío. El turiasonense no logró empalmar un remate que, de haberlo logrado, era sinónimo de gol. Fueron cuatro opciones cristalinas para marcar que el Real Zaragoza tiró a la basura.
Entremedias, el Andorra apenas inquietó a un inédito Cristian Álvarez, pese a que llegó cerca del área con peligro no menos de ocho veces. Les falló siempre a los pirenaicos el último pase, el centro definitivo. Nieto sufrió con Bundu. Gámez con Pampín y Albanis. A Jair no le salieron bien varios despejes. Solo Francés aguantó el tipo, con buenas ayudas de Francho y Zapater. En el 11, Sergio Molina cabeceó un saque de esquina sin encontrar portería. En el 21, Carlos Martínez también remató con la testa un centro de Bundu, fuera por dos metros. Y en el 49, en el amplio aumento decretado por Milla Alvendiz, Hevel echó por encima del larguero el remate más claro del Andorra, en el área chica, tras centro raso de Molina. Esto fue el escaso padecimiento zaragocista en una parte inicial del partido que quedó marcada por las lesiones de los avispas.
Mollejo abandonó el campo en camilla, entre fuertes gestos de dolor tras haber intentado inútilmente volver al césped después de ser vendado en el tobillo derecho en el minuto 30. Lo suplió Puche. Y cuatro minutos después, Bermejo se dolió de un golpetazo en la cadera derecha, que lo dejó K.O. para correr y moverse. Pero aguantó casi un cuarto de hora sin apenas poder hacer nada útil para no gastar la segunda ventana de sustituciones prematuramente. Siete minutos después del 45, el intermedio sirvió de bálsamo para un accidentado partido que el Real Zaragoza ya se lamentaba de no ganar con cierta claridad. Su falta de gol sigue siendo alarmante y tóxica para sus intereses.
Bebé sustituyó al inicio del segundo tiempo al referido Bermejo y, ya sí, debutó como zaragocista en el extremo izquierdo. Vada se fue a la derecha y Puche fue segundo delantero junto a Simeone. Los zaragocistas prosiguieron con su iniciativa ante un decepcionante Andorra, en clara regresión. El despliegue físico de los aragoneses fue tremendo, desde lo más alto de la salida de la pelota cuando los andorranos trataban de construir desde su propia área. Aun así, la primera opción de gol la generaron los tricolores, por medio del efervescente Bundu (de Sierra Leona), que quebró a Nieto en el área y lanzó una rosca venenosa que rozó el palo derecho por fuera en el minuto 52. Fue un aviso para los zaragozanos. Como para que nadie se confiara ante la evidente superioridad en la posesión y el manejo del timón que tenían los de Escribá.
Sarabia hizo un doble cambio en busca de profundidad en el 56, con Gil y Jacobo como recambios. Su equipo estaba, como desde el minuto 1, desenchufado del partido. El Real Zaragoza se daba cuenta de que, de atinar en una jugada ofensiva y lograr el 0-1, la victoria podía estar muy cerca. Puche lo intentó en el 59 tras un robo de Zapater, pero su disparo raso desde la corona lo atrapó bien Vidal. En solo siete minutos, Sarabia hizo otra doble sustitución, introduciendo al goleador Bakis y a Valera para dar un giro total a su ataque. Con poco menos de media hora por delante, se observó a un Zaragoza más conservador. Surgió esa sensación mental del fútbol moderno, intrínseca, de que si no puedes ganar, no pierdas. Es decir, a sujetar el empate.
Escribá relevó a un desdibujado Vada por el suplente Alarcón a falta de 23 minutos y eso llevó a Francho al interior diestro, una decisión tal vez discutible viendo que el canterano estaba bien activado por el centro. Y así se entró en la recta final del choque. Con un segundo tiempo más feo que el primero, que quedó expuesto ya a cualquier error que patrocinara el gol ganador al que se pudiera beneficiar del mismo. Por méritos, no iba a llegar la victoria.
Bebé se mostró en el minuto 74, con una incursión potente en el área que acabó con un centro raso a la boca de gol que sacó la zaga local de un punterazo, anticipándose a Simeone y Puche. Y la réplica la puso en el 79 el turco Bakis, que enganchó un derechazo durísimo desde 30 metros que se fue a un palmo del palo derecho de un superado ya Cristian Álvarez. Empezaban los últimos fogonazos de unos y otros en esa fase de esfuerzos agonísticos que surge cada día en el momento en el que el reloj se acerca a toda velocidad al minuto 90. Así, en el 83, un chut de Altimira se envenenó en el empeine de Zapater y rozó el larguero con Cristian rebasado por alto. El Andorra más inspirado asomó en esta parte última del duelo y los de Escribá se vieron obligados a atrincherarse.
Cristian Álvarez, un día más, se erigió en salvador del equipo en el minuto 89, con un paradón superlativo a disparo cruzado de Jacobo que iba dentro a media altura. Y, además, esta intervención ganó valor cuando en el minuto 92 Bebé firmó el ansiado 0-1 en una contra de Simeone tras un robo de Francho en campo propio. El luso-caboverdiano acabó un mano a mano con clase, justo un par de minutos después de haber mandado un golpe franco directo desde 40 metros a la calle, quizá a Puigcercá o al túnel del Cadí. Fue el colofón perfecto a su estreno, a su apuesta. Se quitó la camiseta, se volvió locó, generó la felicidad completa en el banquillo. Casi ni se sacó de centro. Todos se fueron a abrazar a… Cristian Álvarez. Ahí estuvo la clave del triunfo que rubricó después Bebé. Hasta Mollejo, con muletas, saltó desde la grada para cantar esta vital victoria junto a los 350 zaragocistas desplazados a Andorra.
El 0-0 que se estaba escriturando ya en el acta iba a ser una nueva decepción para el zaragocismo. El 0-1 in extremis, con el aderezo de que haya sido Bebé el que cobrará sus derechos de autor, cambió de raíz la percepción y la evaluación. El gol. Un gol. Eso es lo que sirve en este deporte del fútbol. No hay más que hablar si aparece y sirve para vencer y sumar.
Ficha Técnica
FC Andorra: Vidal; Bundu (Germán Valera, 63), Petxarromán (Altimira, 75), Alende, Mármol, Pampín; Aguado, Hevel, Sergio Molina (Iván Gil, 56); Carlos Martínez (Bakis, 63) y Albanis (Jacobo Glez., 56).
Real Zaragoza: Cristian Álvarez; Gámez, Francés, Jair, Nieto; Francho, Zapater (Grau, 86); Bermejo (Bebé, 46), Vada (Alarcón, 67); Mollejo (Puche, 31) y Simeone.
Árbitro: Milla Alvendiz (Comité Andaluz). Amonestó a Bebé (92).
Goles: 0-1, min. 92: Bebé.
Incidencias: Tarde agradable en Andorra la Vella, con 8 grados al inicio del choque (las 16.15) en un día soleado. El césped del Nacional andorrano presentó un excelente aspecto, con algo de hielo recogido en el fondo sur por las bajas temperaturas de las últimas madrugadas (hasta -7 grados). Asistieron a las gradas alrededor de 2.200 espectadores (sobre un aforo total de 3.500), de ellos 350 llegados desde Aragón. El Real Zaragoza vistió de avispa.
SD HUESCA X-X SD HUESCA
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