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22.6.2008 Partido Nº 546 ESPAÑA 0 - ITALIA 0 EUROCOPA 2008

Partido Nº 546    22.6.2008

 

ESPAÑA

0 - 0

ITALIA

     .

 

 

 

 Cuartos de final - 22 junio 2008 - Viena - Ernst Happel

 

 España se sacude los fantasmas

España

España

0

 

 

0

Italia

 

  1

Iker Casillas

  4

Marchena

  5

Puyol

  11

Capdevila

  15

Sergio Ramos

  6

Iniesta

  8

Xavi

  19

Marcos Senna

  21

Silva

  7

David Villa

  9

Fernando Torres

 

 

  1

Buffon

  2

Panucci

  3

Grosso

  4

Chiellini

  19

Zambrotta

  10

De Rossi

  13

Ambrosini

  20

Perrotta

  22

Aquilani

  9

Toni

  18

Cassano

 

 

CAMBIOS

 

59'

Iniesta por Cazorla

60'

Xavi por Cesc

85'

Fernando Torres por Güiza

 

 

58'

Perrotta por Camoranesi

75'

Cassano por Di Natale

108'

Aquilani por Del Piero

 

 

ENTRENADORES

 

Luis Aragonés

 

 

Roberto Donadoni

 

 

TANDA DE PENALTIES (4-2)

 

 

 

TARJETAS

 

11' 

Iniesta Tarj. A

72' 

David Villa Tarj. A

112' 

Cazorla Tarj. A

 

 

31' 

Ambrosini Tarj. A

 

 

OTROS DATOS DE INTERÉS

 

Eurocopa

Estadio: Ernst Happel

22/06/2008 20:45

Arbitro: Herbert FANDEL

Cuarto Arbitro: Frank DE BLEECKERE

Jueces de Línea:Volker WEZEL , Carsten KADACH

 

 

 

Estadísticas de los equipos

Spain

 

Italy

4

Goles

2

3

Tarjetas amarillas

1

0

Tarjetas rojas

0

6

Remates a puerta

3

15

Tiros fuera

5

26

Faltas cometidas

25

8

Córners

3

3

Fueras de juego

4

49' 13''

Pos. Balón

37' 35''

56%

Pos. Balón (%)

44%

 

Estadísticas jugadores

Spain

Nombre del jugador

G

TP

TL

RP

TF

FC

FR

FJ

AS

TA

TR

1

Iker Casillas

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

4

Carlos Marchena

 

 

 

 

1

1

1

 

 

 

 

5

Carles Puyol

 

 

 

 

 

1

3

 

 

 

 

6

Andrés Iniesta

 

 

 

 

2

2

1

 

 

1

 

7

David Villa

 

 

 

2

2

5

6

 

 

1

 

8

Xavi Hernández

 

 

 

 

1

 

1

 

 

 

 

9

Fernando Torres

 

 

 

 

 

2

2

2

 

 

 

11

Joan Capdevila

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

15

Sergio Ramos

 

 

 

1

2

5

 

 

 

 

 

19

Marcos Senna

 

1

 

1

1

5

3

 

 

 

 

21

David Silva

 

 

 

1

3

1

3

 

 

 

 

13

Andrés Palop

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

23

Pepe Reina

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

2

Raúl Albiol

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

3

Fernando Navarro

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

10

Cesc Fàbregas

 

 

 

 

 

2

1

1

 

 

 

12

Santi Cazorla

 

 

 

 

1

 

4

 

 

1

 

14

Xabi Alonso

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

16

Sergio García

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

17

Daniel Güiza

 

 

 

 

2

1

 

 

 

 

 

18

Álvaro Arbeloa

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

20

Juanito

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

22

Rubén de la Red

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Italy

Nombre del jugador

G

TP

TL

RP

TF

FC

FR

FJ

AS

TA

TR

1

Gianluigi Buffon

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

2

Christian Panucci

 

 

 

 

 

2

 

 

 

 

 

3

Fabio Grosso

 

 

 

 

 

2

1

1

 

 

 

4

Giorgio Chiellini

 

 

 

 

 

1

5

 

 

 

 

9

Luca Toni

 

 

 

 

3

4

4

2

 

 

 

10

Daniele De Rossi

 

 

 

 

 

1

1

 

 

 

 

13

Massimo Ambrosini

 

 

 

 

 

4

2

 

 

1

 

18

Antonio Cassano

 

 

 

 

 

1

3

 

 

 

 

19

Gianluca Zambrotta

 

 

 

 

 

3

1

 

 

 

 

20

Simone Perrotta

 

 

 

1

 

1

 

 

 

 

 

22

Alberto Aquilani

 

 

 

 

1

3

1

 

 

 

 

14

Marco Amelia

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

17

Morgan De Sanctis

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

5

Alessandro Gamberini

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

7

Alessandro Del Piero

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

11

Antonio Di Natale

 

 

 

1

1

 

1

1

 

 

 

12

Marco Borriello

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

15

Fabio Quagliarella

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

16

Mauro Camoranesi

 

 

 

1

 

3

3

 

 

 

 

23

Marco Materazzi

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Los de Aragonés vencen a Italia en la tanda de penaltis y se medirán a Rusia en las semifinales del torneo

 Viena - 22/06/2008

Veinticuatro años después España por fin se sacudió unos cuantos fantasmas. Lo hizo tras matricularse con entereza ante un rival con colmillos, de esos a los que hay digerir hasta el hueso. La selección de Luis tuvo el cuajo necesario para no destemplarse en un partido de máxima exigencia, forzada hasta la extenuación por Italia, que a falta de talento fue el equipo crudo que se esperaba, lo que engrandece la victoria española. No sólo por el resultado, no sólo por alcanzar su primera gran semifinal desde la Eurocopa de 1984, sino por haberse sobrepuesto la penitencia de los penaltis, una vieja cruz. La victoria tuvo un enorme valor simbólico y anímico, una vacuna contra el pesimismo crónico del fútbol español. Esta generación tiene recorrido.

Bajo un bochorno atmosférico, el partido, tan emotivo y agónico al final, no arrancó hasta pasado el descanso. La selección de Luis destiló un fútbol anémico, demasiado tierno, con muchos jugadores con cadenas en los pies, paralizados quizá por esa hipoteca histórica que pagan todas las generaciones españolas Incapaz de exorcizar tantos demonios, España concedió una ventaja capital a su adversario: que el tiempo avanzara sin que nada ocurriera, sin sobresaltos. Un paisaje idóneo para Italia, que nunca sintió que tuviera que mover el árbol. A los italianos les van los partidos contemplativos, de aire pedregoso. Se trata de que nada ocurra a la espera de una falta, un pelotazo a Toni o cualquier rebote. Encogida España, el calentamiento se prolongó hasta la eternidad, sin chispas, todo muy funcionarial. En el primer acto, con el partido a los pies de Xavi, a su alrededor sólo hubo barbecho. Apenas dos diagonales de Silva cuando se desplazó a la derecha alteraron a Buffon, que atajó el primer disparo y sólo pudo visualizar de forma angustiosa el segundo, extraviado por un palmo. De Italia sólo hubo una pista, cómo no, de Toni, que estrelló un cabezazo en el cuello de Marchena, que a falta de centímetros hizo de dique. Ya en el segundo periodo, con su corpachón, Toni, un futbolista sin techo, armó un alboroto frente a Casillas que finalmente resolvió el capitán español al despejar con el pie un remate de Camoranesi a centímetros del gol. Sin tacones, Puyol y Marchena tuvieron que aplicar el mejor manual para frenar a la "grúa" italiana.

Ante tanto sosiego, a Italia le bastaba con neutralizar las líneas de pase y desenchufar a sí a Villa y Torres, obligados la mayor parte de las veces a jugar de espaldas. España tampoco encontró una vía con Iniesta, esterilizado todo el campeonato, sin ángel. Como en las jornadas precedentes, Luis le retiró al inicio del segundo tramo. El duelo necesitaba un agitador y durante el torneo nadie ha cumplido mejor con ese papel que Cazorla. Al tiempo, el seleccionador relevó al principal guionista y apostó por el repertorio de Cesc en detrimento de Xavi. España cambió de marcha, con algo más de vértigo, Torres y Villa por fin pudieron jugar con la vista al frente. Italia no capituló en defensa, pero su medio campo se descosió. Con más horizonte para ambos equipos, el encuentro se volvió menos crudo. A falta de poética, hubo tajo en las áreas, en las dos direcciones. Italia, siempre con Toni como diana; España, más coral. Si Camoranesi había tenido su momento, llegó entonces el de Senna, excelente en el segundo trecho, cuyo zurriagazo se le escapó a Buffon. El poste le redimió.

En medio de la distensión, el partido adquirió un tono dramático, consecuencia de la zozobra que provocó siempre una prórroga, cuando se acortan los plazos y cualquier desliz resulta fatal. Al filo, nadie se maneja como Italia. No importa la edad de sus futbolistas, es hereditario. España tenía que poner prueba su madurez, tanto por la inexperiencia de un racimo de jugadores como su perpetua consternación en las grandes citas.

Luis se jugó la baza final de Güiza. Italia, que no es un equipo plástico, pero sí firme, mantuvo la resistencia. Al fin y al cabo había llevado al límite a un rival superior, con muchos más recursos técnicos. Luego, a esperar alguna Pedrea. Como la que casi se cobra Di Natale, al que Casillas tuvo que desviar un exigente cabezazo. Fue la réplica italiana a otro disparo ajustadísimo de Silva tras un servicio de Güiza, que barrió el frente de ataque con movimientos muy inteligentes para dislocar a los centrales de Donadoni. Al igual que al resto, le faltó precisión y España se vio condenada al casino de los penaltis y, de nuevo, bajo el yugo de la maldición de San Paulino, fecha en la que desplomó a los penaltis en 1986, 1996 y 2002. Una situación extrema para chicos como Cazorla, Güiza y Cesc, más curtido pero ante la ruleta de su vida con sólo 21 años. Acertó Cesc, se agigantó Casillas y España rompió un maleficio. Y no sólo el de Paulino el santo. Superada la gran barrera de los cuartos, ahora quedan dos listones. Ya no hay fantasmas.

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